En un comienzo de semana atípico para los mercados internacionales, con una actividad que va a estar limitada por las fiestas de fin de año, un papel de origen argentino marca la nota en Wall Street al trepar más de 30% pasado el mediodía. Se trata de Despegar, la agencia de viajes digital que supo convertirse en uno de los primeros unicornios del país, que este lunes confirmó que fue vendida a un grupo inversor europeo.
Prosus, una compañía tecnológica internacional, anunció este lunes que firmó un acuerdo definitivo de compra de Despegar (NYSE: DESP), la agencia de viajes digital líder de América Latina, por US$ 1.700 millones. «A partir de esta adquisición, Prosus planea crear sinergias entre Despegar y otros negocios regionales como iFood, una plataforma de delivery líder de América Latina con 60 millones de clientes por año, y Sympla, una destacada plataforma de eventos», explicó la compañía en un comunicado.
Luego del anuncio, el papel de la compañía «despegó» en Wall Street: la acción salta un 31,8% y con este movimiento logra borrar las pérdidas que acumulaba en lo que va del mes: ahora presenta una ganancia de casi 8% en diciembre. Con esta suba, el papel logra colarse entre las siete compañías de origen argentino con mejor rendimiento en lo que va de 2024, al presentar un incremento de precio de más de 104%. Este grupo está liderado por los papeles del sector bancario, que finalizan el año con una suba de hasta 280%.
Los inversores se volcaron a las compras luego de que se conociera el dato de que, finalizada la integración de ambas compañías, Despegar se convertirá en una empresa privada, por lo que sus acciones ordinarias dejarán de cotizar en la Bolsa de Nueva York y también en cualquier mercado público.
Lejos del rally de Despegar, son pocas las empresas argentinas que se mueven en positivo este lunes: Mercado Libre, BBVA y Corporación América son las que más ganan con subas de 1.7%, 1,1% y 0,6% respectivamente. En la otra punta, la mayor baja la presenta el papel de IRSA, con una caída de más de 2%.
Con este contexto internacional, la bolsa porteña se mueve en baja este lunes: pierde 0,2%, pero no llega a borrar la ganancia que acumuló este mes, con una suba de 9%. Por el lado de los bonos también se siente el clima de mayor cautela, con la mayoría de los títulos en dólares operando en terreno neutro o negativo. Con todo, el riesgo país retrocede hasta las 670 unidades, un mínimo que no alcanzaba desde febrero de 2019.
La semana pasada, aún con un clima internacional adverso producto de la baja de tasas de la Fed en Estados Unidos y la expectativa de una política monetaria más restrictiva para los próximos meses, el indicador de la banca JP Morgan para Argentina logró retroceder 37 puntos.
«Aquí los factores locales habrían contribuido positivamente a pesar de lo que fue una semana de alta volatilidad del CCL y volumen récord de AL30. Específicamente, los rumores (y declaraciones) de un posible nuevo acuerdo con el FMI a firmarse en el primer cuatrimestre de 2025 con fondos por una magnitud más elevada de lo previsto pudieron haber sido el catalizador de la semana pasada», afirmaron en PPI.
SN