Las criptomonedas han tenido un año récord en 2024. En enero del año pasado, una docena de ETF de bitcoin al contado comenzaron a repuntar y facilitaron a los inversores el comercio de bitcoin.
En septiembre, una serie de recortes de tipos y otras políticas de los bancos centrales contribuyeron a un nuevo repunte, allanando el camino para una economía en crecimiento. Sin embargo, el verdadero acontecimiento que ha impulsado a este activo digital fue el día de las elecciones estadounidenses, cuando se conoció la victoria de Donald Trump.
El candidato republicano se había mostrado partidario de las criptomonedas durante la campaña electoral y, una vez confirmado su triunfo, ha ido haciendo distintos nombramientos que refuerzan su inclinación por los criptoactivos, como el de Paul Atkins, que presidirá la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés, el equivalente a la CNMV española).
Estos movimientos ayudaron a que el bitcoin superara la barrera de los 100.000 dólares por primera vez en su historia (unos 96.000 euros, según el cambio actual), y otros activos digitales también se movieron al alza.
La euforia ha llevado al mercado cripto a alcanzar una valoración de 3,4 billones de dólares (unos 3,2 billones de euros), casi el doble de su tamaño del último año. «Este año ha sido fuerte para las criptomonedas, con un incremento de más del 90% en su capitalización», señalaron los analistas del Citi, liderados por Alex Saunders.
¿Continuarán las criptomonedas con su racha alcista en 2025? Los expertos de Citi señalan seis factores clave que determinarán el precio de las criptomonedas el próximo año, entre los que incluyen la actividad de los ETF, la regulación y el futuro del mercado para un tipo de criptomonedas conocidas como stablecoins o criptomonedas estables.
1. Un contexto macroeconómico favorable
Los analistas esperan que el actual contexto macroeconómico siga respaldando las operaciones de riesgo en el primer trimestre, pero advierten de que las perspectivas a partir de entonces son menos seguras.
En su opinión, el panorama podría cambiar dependiendo de las políticas económicas de Trump y la volatilidad de las acciones. «La macroeconomía podría volverse menos favorable el resto del año, dada la elevada incertidumbre política en Estados Unidos y las previsiones de volatilidad en la renta variable», añaden desde Citi.
2. Continuas entradas en los ETF
Los analistas pronostican que los fuertes flujos de entrada a los ETF de criptomonedas al contado en su primer año de cotización continuarán en 2025. De esta forma, se proporcionará un motor adicional para el crecimiento de las criptomonedas.
Los ETF de bitcoin han visto entradas de 36.400 millones de dólares desde que comenzaron a operar en enero, mientras que los ETF de ethereum han recopilado 2.400 millones de dólares desde que batieron al mercado en julio.
Los ETF recibieron el visto bueno de la SEC el año pasado tras un proceso de aprobación de un año y han servido para facilitar el comercio de criptomonedas. Al invertir en los fondos, los inversores pueden acceder a los movimientos de precios de bitcoin y ethereum sin tener que comprar las propias monedas. «Estos flujos han sido el motor más importante de los rendimientos de las criptomonedas y esperamos que continúen en 2025», afirman los analistas.
3. Las cripto se posicionan en las carteras multiactivos
La asignación de las carteras también puede ser clave para futuros retornos. Los analistas sostienen que el bitcoin habría añadido valor a las carteras durante el rally alcista de este año. Aún así, continúa siendo un activo de riesgo y volátil, con asignaciones por encima del 3%, contribuyendo hasta un 10% o más al riesgo total de la cartera.
Como resultado, los analistas de Citi creen que los rendimientos de las criptomonedas deben situarse unos puntos porcentuales por encima de los rendimientos esperados de la renta variable para justificar una asignación del 1% de las carteras, y mucho más para una proporción mayor.
«Para una asignación del 5%, el rendimiento debe ser superior: dos dígitos utilizando la relación riesgo-recompensa a largo plazo del S&P, o un 21% utilizando los rendimientos recientes, donde la alta relación recompensa/riesgo implica que los inversores deben ser bien compensados por asumir riesgos adicionales», apuntan los analistas.
4. Emisión de stablecoins
Los analistas vaticinan que la continua emisión de stablecoins, que recibió un impulso tras la victoria electoral de Trump, en medio de un renovado entusiasmo en la industria, ayudará a crear un mercado de criptomonedas más saludable.
Las stablecoins están pensadas para mantener el precio estable a lo largo del tiempo. Suelen estar vinculadas a una moneda fiduciaria, como el dólar estadounidense, lo que significa que son menos volátiles que las criptomonedas, como el bitcoin, siempre que el emisor de la stablecoin tenga suficientes garantías para respaldarla.
Además, los analistas apuntan que la entrada de más stablecoins en el espacio podría amenazar el liderazgo de Tether, a la cabeza de las stablecoins desde hace mucho tiempo. En particular, aluden a una nueva asociación entre Circle y el intercambio centralizado Binance.
«Las innovaciones, las asociaciones y los nuevos participantes en el espacio de las stablecoins suponen un riesgo para el dominio de Tether«, afirman. También añaden que estos desarrollos probablemente ayudarán a las stablecoins a seguir liderando el camino hacia las finanzas descentralizadas.
«Consideramos positiva la diversificación del mercado de stablecoins, ya que reducirá los posibles riesgos sistémicos de un emisor específico», recalcan desde Citi. «Una adopción más generalizada de stablecoins con usos más allá del comercio de criptomonedas sería, probablemente, un factor impulsor de una mayor participación de DeFi (abreviatura en inglés de finanzas descentralizadas)», apuntan.
5. Una adopción más extendida
Para los analistas, el asunto principal es la monitorización de la adopción. Aunque la actividad de los ETF y los volúmenes más amplios han mejorado, y la capitalización del mercado de stablecoin ha aumentado, se requiere una adopción más generalizada para producir rendimientos más allá de la euforia postelectoral, advierten desde Citi.
Los analistas aseguran que están monitorizando los volúmenes de bitcoin, los valores de mercado de stablecoin y el aumento de la adopción en países con problemas de divisas, como Turquía, la Argentina y Venezuela.
6. Menos regulación
Por último, los analistas sostienen que la regulación será un tema reinante el próximo año con la llegada de Trump al poder. El presidente entrante de Estados Unidos ha nombrado a varios candidatos pro-cripto para su gabinete. Sus políticas siguen sin estar claras, aunque el sector en general espera una regulación más ligera, lo que podría impulsar una adopción más generalizada.
«Es probable que el resultado sea un cambio de la regulación por la aplicación a un enfoque más basado en la legislación«, predicen los analistas, al tiempo que añaden que «no es tanto una historia de desregulación, sino más bien una eliminación de los vientos en contra».