El dato de inflación de mayo, que marcó un 1,5%, el más bajo desde 2020, abre una nueva etapa en la política económica argentina, según expertos.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el analista financiero, Marcelo Bastante, quien comentó que, “hoy el contexto es diferente, estamos viendo los frutos del ajuste fiscal y una política monetaria estricta”.
“Este 1,5% está muy por debajo de lo que esperaba el mercado”, agregó, destacando que los pronósticos se ubicaban en torno al 2%. El último dato similar se remonta a mayo de 2020, aunque bajo condiciones totalmente distintas por la pandemia.
Un sendero positivo pero sensible a los shocks externos
Bastante fue enfático al advertir que si bien el rumbo es correcto, no todo depende de las decisiones locales. “Siempre hay variables no controlables; por ejemplo, el precio del petróleo tras el ataque de Israel a Irán”, advirtió. Ese tipo de eventos puede alterar el panorama incluso en un esquema de inflación descendente.
“La tendencia es descendente, pero siempre hay que ser cautos”, insistió, señalando que aún existen ajustes pendientes , como tarifas, que podrían generar picos puntuales en algunos meses.
¿Se consolida Argentina como país de inflación moderada?
El analista explicó que el país está transitando hacia una lógica económica más previsible: “Se está yendo en la dirección correcta para normalizar la economía”. Sin embargo, reconoció que Argentina todavía reacciona con mayor sensibilidad frente a las turbulencias internacionales: “Siempre que hay crisis afuera, los emergentes como Argentina son los más golpeados”.
En cuanto al riesgo país, Bastante apuntó que sigue siendo elevado, pero con una perspectiva optimista: “La expectativa es que Argentina se alinee con sus pares emergentes en torno a los 200 o 300 puntos”.
Reservas: ¿llega el momento de intervenir?
Sobre si el Gobierno debería modificar su estrategia, Bastante fue claro: “Por ahora, se están cumpliendo los comunicados del Banco Central de no intervenir dentro de la banda cambiaria”. El economista explicó que el Gobierno ha comenzado a sumar reservas a través de colocaciones de deuda en dólares, un paso importante hacia la estabilidad externa.
Inflación núcleo, precios relativos y recomposición
En relación a la inflación núcleo, que fue de 2,2% en mayo, Bastante considera que es cuestión de tiempo para que se acomode al ritmo general. “Hay que cumplir con la hoja de ruta trazada y mantener la disciplina”, dijo.
También explicó que el reacomodamiento de tarifas pendientes, como energía y transporte, aún repercute en el poder adquisitivo. “El sinceramiento tarifario afecta, pero es parte del proceso de transición hacia una economía sin inflación”, explicó.
¿Y el bolsillo?
El analista reconoció que aún no se siente la recuperación en el consumo cotidiano: “Todavía no se llegó a recomponer el 100% del poder adquisitivo”. Sin embargo, observó señales positivas en el aumento del consumo de bienes durables y una menor tendencia al sobrestockeo por parte de las empresas: “En un mundo sin inflación, las decisiones económicas cambian completamente”.
Aunque persisten desafíos estructurales, Bastante concluyó que “es una cuestión de tiempo hasta que se reacomoden todas las variables”. Con la inflación en descenso y medidas fiscales consistentes, el Gobierno parece estar construyendo un escenario de mayor previsibilidad.