No hay dudas de que F1, la película de Joseph Kosinski, con Brad Pitt, va a ser uno de los estrenos más esperados de esta temporada 2025. Ya tiene fecha de estreno confirmado -el 26 de junio- y acaba de estrenar un nuevo e impactante trailer.
El filme del director de Top Gun: Maverick sigue a un expiloto de Fórmula 1 (Brad Pitt) que regresa a las pistas para convertirse en mentor de un debutante.
Pero ¿Brad Pitt realmente manejó en los circuitos internacionales como se verá en la película? ¿Y a qué velocidad?
Clarín fue el único medio argentino que fue invitado a charlar con Joseph Kosinski antes de la presentación del nuevo trailer del filme. Fue un encuentro con medios de prensa internacionales.
Pero antes de hablar con Kosinski, hubo una sorpresa. Lo presentaron así:
“Tenemos un mensaje muy especial de alguien que, bueno, creo que todos conocen y admiran, quien seguramente hubiera querido estar aquí en persona, pero tiene un pequeño compromiso laboral este fin de semana por el que se está preparando… Es productor de F1, siete veces campeón del mundo. Dejemos que se presente él solo”.
Con ustedes, Lewis Hamilton
“Hola a todos, soy Lewis Hamilton, piloto de Fórmula 1 y uno de los productores de lo que será la película de carreras más auténtica que jamás hayan visto en el cine: F1. Joe, Jerry, Brad, el elenco y todo el equipo se esforzaron muchísimo para ofrecer una auténtica experiencia de carreras de Fórmula 1, como nunca antes se había visto en pantalla.”
“Como habrán oído, la película se rodó durante las carreras de F1 a lo largo de una temporada, y con Joe al mando, el público de todo el mundo se sentirá como si estuviera en la pista, al volante. Ver a Brad conducir a velocidades superiores a 290 kilómetros por hora fue realmente impresionante, porque no es algo que se aprende de la noche a la mañana. Y la dedicación y la concentración que Brad puso en este proceso ha sido asombrosas.”
“Esta película lo tiene todo: Brad Pitt, velocidad, emoción, una historia épica de un perdedor, drama, humor y un toque de romance. Puede que incluso reconozcas algunas caras conocidas del mundo de la Fórmula 1. Como alguien que ha dedicado toda su vida a este deporte, me siento sumamente honrado de haber trabajado junto a este equipo de actores y cineastas. Ha sido una gran emoción para mí. Y les prometo que esta película cumple en todos los sentidos. La película F1 llega a los cines de todo el mundo este junio. Así que, hasta entonces, aquí está Joe para contarles más sobre la película más popular del verano, “F1.”
El piloto británico el domingo correrá para Ferrari en Melbourne, Australia, en la primera carrera de la temporada 2025.
Y a continuación, comenzó la charla con el director.
-Joseph, ¿qué te motivó a hacer una película sobre la Fórmula 1?
-Creo que, como mucha gente durante la pandemia, empecé a ver las carreras. Y descubrí un programa de televisión genial llamado Drive to Survive. Descubrí que es un deporte increíblemente único, ya que tu compañero de equipo también es, en muchos sentidos, tu mayor rival. Y para mí, eso crea un gran drama. También me encantó cómo la primera temporada del programa se centró en los últimos equipos, los menos favorecidos, en lugar de Ferrari, Mercedes, Red Bull. Y pensé que había una historia interesante que contar sobre un equipo menos favorecido, que intentaba no ganar el campeonato, sino simplemente ganar una carrera contra estos titanes del deporte. Así que ahí empezó todo. Y por suerte para mí, tenía un contacto en la Fórmula 1 al que podía acceder, así que lo hice.
Los consejos de Lewis Hamilton
-Recrear la naturaleza de alta velocidad de la Fórmula 1 en pantalla debe haber sido un gran desafío. ¿Qué medidas tomaron para garantizar que la intensa velocidad de este deporte se sintiera lo mejor posible para el público?
-Bueno, lo primero que hice fue contactar a Lewis Hamilton, quien me dio una introducción increíble, y obviamente él vive este deporte a diario. Es uno de los mejores de todos los tiempos, y le pedí que fuera mi compañero en la realización de esta película. Contar con Lewis me abrió las puertas a este mundo, y una de las personas que me presentó fue Toto Wolf, el director del equipo Mercedes. Empecé a hablar con ellos sobre la idea de capturar la velocidad de este deporte, y fue Toto quien tuvo la idea de que, en lugar de hacer un coche de película lo suficientemente rápido como para alcanzar esas velocidades, hiciéramos otra cosa…
Me dijo: «¿Por qué no empezar con un coche de carreras, usar un coche de carreras real y luego integrar las cámaras necesarias?». Y así lo hicimos. Compramos seis coches de F2, coches de carreras de F2 reales, y trabajamos con Mercedes AMG, el equipo de Fórmula 1, y sus ingenieros para construir coches de carreras reales que pudieran transportar nuestro equipo de cámaras, grabadoras y transmisores para la realización de esta película.
Así que cada vez que vean a Brad o Damson Idris conduciendo en esta película, lo hacen solos en uno de estos coches de carreras reales en una pista de F1 real. Así es como abordamos la realización de esta película.
-Esos hombres y mujeres tras bambalinas en este deporte son casi los héroes anónimos, los ingenieros y toda la gente que construye estos coches, supongo que también son muy importantes para el éxito del deporte.
-Sí, los pilotos son sin duda la imagen y están ahí en el coche cada fin de semana, pero hay literalmente miles de personas en la fábrica trabajando en estos coches, armándolos el día de la carrera. Muchas de las piezas se fabrican días antes de la carrera y se instalan en el coche. Ese era el otro aspecto que quería que esta película capturara: no solo la historia de los pilotos, sino también la de los ingenieros, los directores del equipo, los dueños de los equipos, todas las personas que dan vida a este deporte y ponen ese auto en la pista cada fin de semana.
Brad Pitt y su entrenamiento
-Nombraste a Brad, que interpreta a Sonny Hayes, y quería saber sobre el entrenamiento de Brad. Escuchamos a Lewis mencionar que corría 290 km/h en un auto. ¿Podrías decirnos exactamente qué implicó ese proceso de entrenamiento? Porque fue Brad quien condujo en la película.
-Sí, bueno, sí lo fue. Brad y Damson conducen en esta película y, para que pudieran subirse a estos autos de carreras, se necesitaron meses, literalmente meses de entrenamiento. Pero el primer día fue muy divertido. Éramos Brad, Lewis Hamilton y yo juntos en la pista, todos subiendo a los coches y conduciendo. Fue una de esas cosas que nunca olvidaré, tener a Lewis Hamilton como instructor de manejo.
Pero lo que aprendimos, y lo que realmente le interesaba a Lewis, era ver si Brad sabía conducir bien. Porque si Brad no sabía conducir, la película no iba a funcionar. Y lo que Lewis descubrió con mucha alegría fue que Brad tenía una gran habilidad natural desde el principio, y no sé de dónde la sacó o si nació con ella.
Además, anda en moto, lo cual creo que tiene algo que ver, pero es un piloto muy talentoso y con un don natural. Esto le dio a Lewis, después de esa primera reunión, mucha confianza en que podríamos tener al menos una oportunidad de lograrlo.
-Supongo que la valentía no es algo que se pueda fingir. Es algo que, en cierto modo, se necesita tener…
-Sí, como dije, tiene esa sensación natural de agarre en el coche, y lo que estamos haciendo en esta película es peligroso. Así que sí, hay que ser valiente, y cuando ves a Brad conduciendo, eso no es actuación. Está muy concentrado en mantener el coche en la pista y no pegarse contra los muros durante todas esas escenas. Así que creo que eso es algo que no se puede fingir. Espero que el público lo sienta al ver la película.
-¿Hay que ser aficionado al automovilismo para disfrutar de la película?
-Para nada. Esta es una película sobre la amistad, el trabajo en equipo, el sacrificio y la redención. Creo que la historia es universal. Simplemente se ambienta en el apasionante mundo de la Fórmula 1, y si sos fan de la Fórmula 1, creo que te va a gustar. Si no sabés nada de Fórmula 1, creo que te va a gustar y puede que salgas con ganas de ver algunas carreras, o incluso ir a alguna. Así que sí, no necesitás saber nada de antemano. Te enseñaremos todo lo necesario para disfrutar de esta historia.
-Hablaste de Lewis y su participación, lo importante que fue para vos. En cuanto a esa colaboración y a contar con otros profesionales de la Fórmula 1 como parte de ese viaje, ¿cómo influyó su aporte en la narrativa y las secuencias de carreras de la película?
-Lewis fue fundamental no solo en los aspectos técnicos, obviamente, sino también en la etapa de formulación de la película, creando esta narrativa. Contamos la historia de Sonny Hayes, un piloto veterano, y luego la de Joshua Pierce, un novato. Lewis ha sido ambos. Fue el novato que casi ganó su primera temporada en la Fórmula 1 y ahora cuenta con siete Campeonatos Mundiales. Lo ha visto todo. Así que su perspectiva al dar forma a la narrativa de estos dos personajes y al darme una idea clara de lo que los motiva, de lo que los impulsa a hacer esto día tras día, fue realmente útil. No podríamos haber hecho esta película sin él.
-Tus películas, como en “Top Gun: Maverick”, suelen tener dos caras, la acción es una parte fundamental, pero no descuidás el lado emocional y humano. Si gran parte de la atención se centrará en la acción, ¿qué tan importante fue asegurarse de tener un conjunto de personajes convincentes que se sintieran auténticos dentro del mundo de las carreras? ¿Y cómo lograron eso dentro de la Fórmula 1?
-Siempre empieza con un gran guion y una gran historia. Sabía que, por muy precisas o emocionantes que sean las carreras, no significa nada si no se cuenta una historia respaldada por grandes personajes. Así que todo empieza con el guion y trabajé con Aaron Krueger, quien también trabajó en Top Gun: Maverick. Y luego, el casting lo es todo. Y el grupo de actores que reunimos para esta película es increíble. Javier Bardem y Brad, su amistad, que ya tiene tres décadas, es el núcleo de esta historia y de esta película, y verlos juntos en pantalla es realmente especial.
Kerry Condon es increíble. Ella interpreta a la directora técnica del equipo, la encargada del diseño del coche, de los ingenieros y de los pilotos. Hay una tensión sana en cada equipo, lo que crea una gran relación entre ambos. Y luego está Damson Idris, a quien la gente quizá conozca por su carrera televisiva, pero quizá no por el cine. Me emociona mucho que la gente lo vea aquí, enfrentándose a Brad en la pantalla grande y en una gran historia.
Brad Pitt, humor, romance…
-Y habrá momentos de comedia, como se vislumbra en el nuevo trailer que estrenás ahora.
-Sí, tiene la tensión que esperarías en una película con tanta acción, pero a la vez, tiene mucha emoción, especialmente en la historia de Sonny Hayes y su viaje de redención. Hay humor, hay romance…
-Imagino que parte de tu investigación consistió en asistir a muchas carreras.
-Sí. Una de las grandes ventajas de hacer una película sobre la Fórmula 1 es precisamente la investigación, los viajes y la posibilidad de ver circuitos increíbles por todo el mundo. Y algo que me encanta de la Fórmula 1 es que cada carrera tiene su propia personalidad; cada fin de semana es muy diferente.
Silverstone, Monza, Abu Dabi…
Me refiero a Silverstone, la cuna de la Fórmula 1, donde empezó todo, frente a Spa, una pista increíble que atraviesa el bosque hasta Las Vegas, que es totalmente diferente. Terminamos la película en Abu Dabi, una pista increíble que es una forma espectacular de concluir, y como fuimos a todos estos lugares de verdad, sentís como si hubieras dado la vuelta al mundo al ver la película.
Tenía muchísimas ganas de ir a Monza, en Italia, para ver la antigua pista peraltada del Gran Premio, así que rodé una escena específicamente allí por esa razón. Pero sí, fue un viaje increíble alrededor del mundo.
-Y filmaste durante las carreras reales del campeonato mundial de Fórmula 1. ¿Cómo influyó cada circuito en la narrativa y en la forma en que querías retratar el mundo?
-Las pistas es una cosa, pero el fin de semana de carreras, se convierten en un mundo completamente diferente. Es como un circo ambulante. Así que no podíamos filmar en el circuito sin que la carrera estuviera en marcha. Habría sido la dinámica equivocada. Así que estuvimos allí el fin de semana de carreras con cientos de miles de personas viéndonos, aprovechando esos espacios de tiempo entre los entrenamientos y la clasificación que la Fórmula 1 tan amablemente nos brindó.
A filmar con 30 cámaras
Teníamos franjas horarias de 10 o 15 minutos donde teníamos que tener a Brad y Damson listos en los coches, calentados y con los neumáticos listos para rodar, y en cuanto terminaban los entrenamientos, salían a la pista. Teníamos 24 o 30 cámaras listas, grabando, y yo tenía que rodar estas escenas en intervalos muy cortos, intensos y a alta velocidad. Pero el público que veías estaba realmente allí, en las gradas.
No creo que se dieran cuenta de que Brad Pitt estaba en el coche que tenían delante. Así que, sin duda, había una calidad superior en cada carrera.
También rodábamos escenas dramáticas antes de las carreras, así que era una forma de trabajar muy original, en lugar de tener un día entero para rodar una escena como se haría normalmente en una película. Teníamos franjas horarias de nueve o diez minutos, así que era como una obra de teatro en directo, pero frente a cientos de miles de personas rodando a 290 kilómetros por hora, literalmente. Fue una descarga de adrenalina cada fin de semana, pero lo que capturamos es algo que no se puede fingir, no se puede montar…
-Eso también debió inspirar mucho a los actores.
-Sí, fue como un día de un partido. Recuerdo nuestro primer día de rodaje en Silverstone con Javier, Brad y Tobías Menzies. Tenía un trozo de papel, que parecía un diagrama de fútbol americano, donde cada uno tenía que pararse y caminar, y hacia dónde se movía. Y fue como si lo viéramos y dijéramos: «¡Pausa, vamos a hacer esto!». Y sí, creo que hicimos tres tomas en siete minutos o algo así, y conseguimos lo que se ve en la película. Pero los actores, en su interpretación, lo perciben; saben que no van a tener 15 intentos. Hay que hacer el gol.
-¿Cuál notás que fue el mayor desafío del rodaje de “F1”?
-El gran reto fue el sistema de cámaras en sí. Tuvimos que desarrollar un sistema de cámaras completamente nuevo, aprovechando todo lo aprendido en Top Gun: Maverick y llevándolo mucho más lejos. No se puede cargar 27 kilos de equipo en un coche de carreras y esperar que rinda igual. Así que tomamos esas cámaras de “Top Gun y trabajamos estrechamente con Sony, reduciéndolas a aproximadamente un cuarto de su tamaño.
Además, algo que realmente quería hacer en esta película era poder operar y mover las cámaras mientras rodábamos, algo que no pudimos hacer en Top Gun. Por eso, también tenemos soportes motorizados en el coche. Así que tenemos transmisores que controlan el movimiento de la cámara. Estoy sentado en la estación base con Claudio (el chileno Claudio Miranda), nuestro director de fotografía, mirando 16 pantallas. Tengo operadores de cámara en los controles de las cámaras y todo está en orden. La cámara se mueve como un programa de televisión en directo mientras graban. Se invirtió mucha investigación, tecnología y desarrollo para poder grabar un fotograma, además del entrenamiento de los actores y la logística de rodar en una carrera real. Así que fue una preparación muy intensa para lograrlo.
-¿Pudiste hablar con los actores mientras estaban en la pista?
-Sí, era difícil oírlos. Tienen un motor de 700 caballos justo detrás de la cabeza. Pero sí, pude…
-“Brad, andá más rápido”.
-No, normalmente era al revés. Bajá el ritmo, Brad, por favor.
-También contás con otros colaboradores, el sonido y la música, para lograr que esos elementos sean realmente creíbles. ¿Cómo trabajaste con el gran Hans Zimmer?
-El sonido es una parte fundamental de las carreras. Así que contamos con un diseñador de sonido, Al Nelson, también de Top Gun: Maverick. Estuvo en la pista grabando todos los sonidos reales de los coches. Instalamos micrófonos en los coches de F1 reales, lo cual, como pueden imaginar, fue muy difícil porque cuentan cada gramo que se les pone. Así que instalar nuestras grabadoras en los coches reales fue fundamental para que saliera bien.
Y luego, en cuanto a la banda sonora, sí, tenemos a Hans Zimmer creando otro tema y una banda sonora épicos, y tiene mucho con lo que competir en cuanto a sonido en esta película. Así que realmente lo dio todo. Me entusiasma mucho que la gente escuche la banda sonora de esta película. Lo que Hans hace es algo que pocos compositores pueden hacer: escribir un tema de verdad, una melodía de verdad que simplemente no te podés sacar de la cabeza. Y ha escrito una aquí que está deseando que la gente la escuche.
-¿Cuál fue el mayor logro para vos, personalmente, al hacer “F1”?
-¡Tantos! Es difícil elegir solo uno, pero diría que trabajar junto a Lewis y todos los demás pilotos, y que nos aceptaran, porque sin duda, pedirles que formen parte de esta familia y de ese mundo y que digan que están haciendo una película… Pero cuando vieron nuestra determinación por hacerlo auténtico y representar su deporte lo mejor posible, que nos aceptaran y que pudieran interpretarse a sí mismos en la película, poder rodar en la pista junto a ellos, demostró un nivel de confianza realmente notable.
-Bueno, algunos también tienen ese aire natural de estrella de Hollywood.
-¿No es curioso? Sí. Todos suelen ser muy guapos, encantadores y dan bárbaro en cámara. Y son muy amables.
-¿También pudiste conducir un coche de Fórmula 1 en alguna pista?
-¿Yo?
-Sí.
-De ninguna manera me dejarían acercarme a uno de esos autos mientras dirijo la película. No con esa compañía de seguros. No, lo más cerca que estuve fue ese primer día con Lewis. No conduje un Fórmula 1, pero sí unos deportivos bastante rápidos. Pero después de que empezó la película, me mantuvieron lo más lejos posible de esos autos.