martes, 22 abril, 2025
InicioEconomíaMilei prepara medidas de alto impacto para aprovechar la euforia tras la...

Milei prepara medidas de alto impacto para aprovechar la euforia tras la salida «limpia» del cepo

Javier Milei y su Gobierno vivieron un día de euforia el lunes, primera jornada de apertura del cepo cambiario. La evaluación del equipo económico sobre la eliminación de restricciones para las personas que compran dólares fue muy positiva. Por eso, Milei se cruzó al Palacio de Hacienda y todos terminaron cantando contra los «mandriles».

El video con Milei y el ministro Luis Caputo en el centro de esas celebraciones, rodeados por el viceministro José Luis Daza y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, no tiene desperdicio. Seguramente en Wall Street nunca imaginaron que Daza, un veterano jugador en las ligas financieras, iba a terminar en semejante celebración alocada, pero el estilo Milei es contagioso.

Fue un verano complicado, con crisis de reservas y pérdida del control de la agenda pública. Por eso, hubo festejos tras la visita del secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent, el acuerdo con el Fondo Monetario y un lunes sin traumas para el nuevo esquema cambiario.

En cuanto al fin de las restricciones cambiarias, el asesor presidencial estrella, Santiago Caputo, dijo que fue «la mejor salida del cepo de la historia».

Es por eso que el Gobierno quiere aprovechar este momento de euforia para lanzar una batería de medidas en las próximas semanas.

El Gobierno dejó atrás los errores no forzados y celebra la salida del cepo y el acuerdo con el FMI

El Gobierno no solo celebra el final del cepo para individuos. También aplaude haber superado un trimestre complicado, con numerosos errores no forzados, que le dieron oxígeno a una oposición que estaba contra las cuerdas.

Tras la insólita exposición de Milei contra la cultura Woke en el Foro de Davos donde se esperaba que hablara de inversiones, todo fue cuesta abajo. El affaire $Libra, el fracaso del intento de imponer dos candidatos para la Corte Suprema, los avances de la oposición en el Congreso para crear una comisión investigadora y la imposibilidad avanzar con el proyecto de Ficha Limpia para dejar fuera de combate electoral a Cristina Kirchner, fueron algunos de los traspiés del oficialismo.

Tal vez por eso hubo tanta efusividad para celebrar que el dólar se haya mantenido bajo control tras la reapertura del cepo cambiario luego de seis años de vigencia.

Esto se logró el mismo día en que Bessent, secretario del Tesoro de Donald Trump, llegó a la Argentina y brindó un fuerte respaldo a las «audaces reformas económicas» de Milei.

Todo en medio de un renovado raid presidencial por distintos medios, que incluyó una inédita entrevista de casi cinco horas en el canal de streaming Neura, de su amigo Alejandro Fantino.

Uno de los ejes de esa entrevista fue instalar que la devaluación no se trasladará esta vez a precios. Ese será uno de los ejes discursivos del gobierno en las próximas semanas, en un intento por desbaratar las advertencias de la oposición sobre las posibles alzas de precios que provocaría la nueva depreciación del peso.

El Gobierno parece estar cómodo con el nuevo valor del dólar (que el lunes y martes cerró en $1.230 y el miércoles en $1.160), porque queda a mitad de camino de las dos puntas del esquema de bandas que va de $1.000 a $1.400.

En ese escenario, en la Casa Rosada sostienen que no están dadas las condiciones para remarcar porque el Banco Central frenó la emisión monetaria y el Ministerio de Economía está dispuesto a seguir abriendo las importaciones, lo cual ya se ve reflejado en las góndolas.

«Los precios son los que determinan los costos y no los costos los que determinan los precios«, dijo el Presidente, y sobre la posible reacción de empresarios frente a la liberación cambiaria, disparó: «Que se metan los productos en el orto».

En cuanto a la estrategia para reabrir el cepo, Milei se mostró confiado en que la cotización de la divisa norteamericana «se vaya al piso de la banda», fijada en los $1.000.

«No tenés pesos circulando. Todos los factores monetarios de la Argentina llevan al tipo de cambio a la baja», explicó.

Javier Milei confía en que comience una etapa de buenas noticias

Con los primeros u$s12.000 millones del FMI ya en las reservas del BCRA, el Gobierno asegura que comenzó una escalada de buenas noticias que desembocará en un buen resultado electoral en octubre próximo. Por ahora, el calendario arrancó mal para el oficialismo, con una resonante derrota en Santa Fe.

Milei confía en que se profundizará la estabilidad en torno del dólar en las próximas semanas, y sabe que eso es clave para el humor de los argentinos, sobre todo cuando llega la hora de votar.

Estima que a mediados de años las reservas brutas rondarán los u$s50.000 millones, en buena medida por el respaldo de los organismos de crédito, pero también por una mayor liquidación por parte de la agroindustria.

El jefe de Estado ya presionó al campo para que liquide la cosecha antes de junio, cuando se impondrán nuevamente las retenciones que se quitaron parcialmente a principios de año.

Incluso, dijo que el dólar «se está cayendo de manera brutal» y especuló con que «el tipo de cambio no va a determinar la inflación«, como históricamente ha ocurrido en la Argentina.

Este miércoles, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, brindó su informe de gestión en Diputados y destacó el «logro» de haber levantado el cepo y que la economía está creciendo por encima de todos los cálculos privados: un 6%.

En este escenario, Milei pronosticó que la divisa norteamericana se irá hasta el piso de la banda establecido por el Gobierno, dijo que habrá una acumulación de reservas de 4.000 millones de dólares y que los precios van a bajar porque «los que están remarcando no van a tener demanda. O bajan los precios o quiebran«, disparó.

Pero la escalada de la inflación en marzo, al 3,7%, preocupa el equipo económico. Y por eso se sigue con atención el comportamiento en sectores claves, como el de supermercados.

La batería de medidas que prevé el lanzar el Gobierno para aprovechar la euforia

El Gobierno intentará capitalizar la euforia y aprovechar esta nueva etapa de la gestión con una batería de temas que se prevén soltar en las próximas semanas.

Después de Pascua, es posible que se anuncie la reforma migratoria por decreto, que apunta a endurecer los requisitos para la residencia de los extranjeros en la Argentina y para la obtención del pasaporte. Apuntaría, también, a facilitar los procesos de deportación para quienes viven aquí de manera irregular y, sobre todo, para quienes cometan delitos: la idea es que sean expulsados inmediatamente si son atrapados in fraganti por la Policía.

La iniciativa contempla que los extranjeros paguen por sus servicios en todo el territorio nacional, especialmente el de salud, si no cuentan con DNI.

Además, se crearía una Visa de Inversión. Es decir, quien llegue al país con determinada cantidad de dinero (no está claro aún el monto) podría beneficiarse con el pasaporte argentino de modo inmediato.

Además, se esperan nuevos anuncios en el sector de Oil & Gas. Al destacar el acuerdo con el FMI, Marcos Bulgheroni, Group Chief Executive Officer de Pan American Energy, dijo que se trata de un «reconocimiento al programa económico implementado por el Gobierno. Contribuye a la estabilidad macroeconómica de nuestro país y al fortalecimiento de sus reservas. Permitirá reactivar inversiones y fomentar exportaciones generadoras de divisas».

PAE ya anunció una inversión de u$s250 millones para explorar un área sin antecedentes con actividad de gas no convencional, como el que hay en Vaca Muerta. Es en el Golfo San Jorge, ubicado en Chubut.

Además, varios laboratorios medicinales, como Roche, preparan anuncios en investigación y desarrollo. Laboratorios Gennoma anunció inversiones por u$s50 millones.

Además, el Gobierno enviará una reforma tributaria al Congreso basada en el principio de correspondencia fiscal. «El que quiere gastar, que se enfrente a la población y le diga que le va a cobrar impuestos para ese gasto», señaló Milei.

Explicó que con esta medida se podrá tener «un control sobre la nación, un control sobre las provincias y un control sobre los municipios». Así es cómo, según el presidente, «inexorablemente va a generar competencia fiscal».

En materia electoral, el gran objetivo del oficialismo es cerrar un acuerdo con el PRO para juntos en la provincia de Buenos Aires. En ese sentido, avanzan las conversaciones con Diego Santilli y Cristian Ritondo, aunque Mauricio Macri dijo que por ahora no hay acuerdo alguno.

Macri dijo que habló con Ritondo y que este le dijo que no hubo más avances que las fotos que el Gobierno se encargó de filtrar en las últimas semanas.

La elección bonaerense se encamina a convertirse tan o más relevante que la de la Capital. En ambos casos, porque tanto Jorge Macri como el gobernador Axel Kicillof se juegan el futuro político. Y la gobernabilidad de los próximos años.

Más Noticias